María del Mar Morales
Health coach - Esp. en Nutrición
Última actualización: 5 febrero, 2020
Las rodillas son articulaciones que soportan, junto con los tobillos, todo el peso de tu cuerpo y por ende están expuestas a un continuo desgaste que puede redundar en una disminución de sus principales funciones.
La mayoría de las personas no reparan en la importancia de las rodillas hasta que aparecen molestias que pueden afectar la calidad de vida y la realización de actividades diarias.
Aunque suelen aparecer con mayor frecuencia en la edad madura, los dolores de rodilla son cada vez más comunes entre jóvenes como consecuencia de diferentes factores, dentro de los que destacan accidentes, exceso de peso, debilidad muscular y posturas inadecuadas.
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Consejos para fortalecer tus rodillas

Mantén un peso adecuado
El sobrepeso es una de las principales causas por las que aparecen los dolores en las rodillas y otras articulaciones. Cada kilo de más puede contribuir a una mayor presión en esta zona de tu cuerpo.
Realizar ejercicio con regularidad
Si eres una persona sedentaria y no practicas ningún ejercicio o deporte, ya eres más propenso a sufrir dolores o molestias en las rodillas.
Es importante que realices al menos 30 minutos de actividad física al día, sin embargo no debes olvidar efectuar un calentamiento adecuado, no realizar sobresfuerzos, utilizar un calzado adecuado para hacer ejercicio y realizar estiramiento cuando hayas terminado.
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Fortalece tus músculos
Desarrollar músculos fuertes alrededor de tus articulaciones puede reducir notablemente el impacto sobre las mismas y prevenir dolencias.
En el caso de tus rodillas, prueba con ejercicios focalizados en los cuádriceps, los isquiotibiales y los abductores y aductores de cadera
Utiliza un calzado adecuado
El uso de zapatos como tacones o plataformas muy altas, zapatos duros o que no se adapten adecuadamente a tu pie, también puede ser un desencadenante de malestar en tus rodillas.
Cuida tu alimentación
La alimentación es clave para mantener unas articulaciones fuertes y sanas, por eso es importante que siempre privilegies los alimentos naturales y frescos, y que evites al máximo los procesados, los embutidos y las grasas dañinas.
Lleva una dieta antiinflamatoria y rica en antioxidantes puede serte de mucha ayuda.
Escucha a tu cuerpo
Mantente alerta a cualquier señal de dolor o molestia que aparezca en tus rodillas. Ante cualquier síntoma es importante que reflexiones sobre tus hábitos y corrijas cualquier error que pueda estar propiciando las dolencias.
Si el dolor persiste, acude a tu médico para que pueda descartar cualquier enfermedad subyacente.
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