María del Mar Morales
Health coach - Esp. en Nutrición
Última actualización: 7 julio, 2020
Los hongos en las uñas, conocidos como onicomicosis, son un problema bastante común que puede resultar bastante molesto y, en algunos casos, doloroso.
Esta afección puede ser provocada por una higiene inadecuada, exceso de sudoración, lesiones en los pies, diabetes, sistema inmunitario debilitado o por problemas de circulación sanguínea.
Los hongos pueden ser difíciles de tratar ya que son muy resistentes, sin embargo existen algunos remedios y medidas de cuidado personal que puedes poner en práctica para combatir la infección.
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Remedios naturales
Agua con vinagre y bicarbonato
Pon a calentar agua hasta que alcance una temperatura alta pero soportable. Vierte el agua caliente en un recipiente ancho, agrega 1/2 vaso de vinagre blanco y 1 cucharada de bicarbonato de sodio.
Sumerge los pies en esta mezcla durante 15 minutos. Luego, seca bien tus pies y aprovecha para limar y cortar la uña afectada.
Ungüento de ajo y limón
Machaca muy bien un ajo hasta que no queden grumos. Luego agrega unas gotas de limón fresco y revuelve bien hasta formar una pasta homogénea.
Unta esta mezcla en la uña afectada y déjala actuar durante toda la noche. Al día siguiente lava con abundante agua y saca bien.
Aceites esenciales
Mezcla unas gotas de aceite de coco con otras de aceite de árbol de té. Frota la mezcla en tus manos para que se caliente de forma natural y aplícala en la uña afectada con suaves masajes.
Repite una vez por día y deja que actúe y se seque naturalmente.
Infusión de canela
Prepara una infusión con 1 litro de agua y unas 6 ramas de canela más unos clavos. Deja calentar a una temperatura soportable.
Sumerge tus pies durante 15 minutos, luego pásalos por agua fría y sécalos muy bien.
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Consejos adicionales
1.Recorta y lima las uñas con frecuencia. Esto ayudará a disminuir la presión y facilitará la absorción de las cremas o remedios que apliques.
2. Seca bien tus pies antes de ponerte medias o zapatos. El exceso de humedad favorece la aparición de hongos.
3. No uses zapatos demasiado apretados ni cerrados. Deja que tus pies respiren.
4. Preferiblemente no uses esmalte hasta que la uña se haya recuperado, pero si decides hacerlo elige un esmalte de uñas antifúngico.
5. Usa siempre tus propios implementos de aseo (cortauñas, limas, etc…) y esterilízalos después de casa uso.
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